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martes, 26 de mayo de 2020

Nuestros Temas: UNSJ y la sociedad. Proyecto CONEX

Diagnósticos en finca: encontrar problemas y solucionarlos


Diagnóstico general
El estado general de la finca es muy bueno, con algunas oportunidades de mejora. El uso de riego presurizado, desmalezadora y máquina para aplicar herbicidas permiten un adecuado control de malezas, correcto manejo sanitario y buen estado general del viñedo.

Cuartel Cereza (3). Hay una adaptación de riego por goteo en un cultivo establecido. En estos casos, para una buena adecuación al cambio, se deben hacer tres riegos gravitacionales durante el primer año, dos durante el segundo y  uno al tercero. De esta forma, las raíces paulatinamente se adaptarán a la forma del bulbo húmedo, la que tiene relación directa con la textura del suelo. Se observa un sector dentro del cuartel con signos de intoxicación con cloro, como consecuencia de un déficit hídrico. Dado que se trata de riego por goteo en una parte del cuadro, es probable que haya un problema en profundidad ligado a una napa freática cercana, cambios de textura, acumulación de agua al nivel de las raíces o revenicion. Para determinar el origen del problema es necesario hacer una calicata (1,8 m de profundidad; 1,50 m de largo y 1 m de ancho entre dos plantas sobre la hilera). En este sector, se sugiere realizar una poda a pitón.

Importante: en otoño-invierno, se debe aprovechar la oportunidad, antes o durante las podas para regular las maquinarias. Una máquina para aplicación de herbicidas debe regularse para un gasto de 200 l/ha y un tiempo operativo de 2 h/ha. Una pulverizadora/atomizadora debe regularse para un gasto de 600 a 800 l/ha con un tiempo operativo de 3 h/ha. Para esto es necesario seguir las guías de regulación (solicitar), ajustando picos, verificando filtros, funcionamiento del sistema y haciendo mediciones de erogación y velocidad de avance.

Recomendación general: para evitar movimientos de las mangueras de riego se sugiere colgarlas de modo permanente a 45 cm desde el suelo. Esto reducirá el costo aparejado al levantado y colocación en sitio, evitará que los goteros se tapen, reducirá rupturas con el tractor o daños provocados por liebres y tunduques.

Pedro Giménez. En este caso se trata de un cuartel con plantas envejecidas y en punto de corto (ingreso=costo/ingreso<costo). Se sugiere, hasta que se pueda replantar, manejar un esquema de costo mínimo, con podas a pitón.

Se observa, en más de un cuartel, que no se respetó el criterio de poda de formación, por lo que existen braceros que crecen por encima de los alambres, lo que dificulta la poda, hace que la planta pierda forma y genera sarmientos no frutales. También, entre otros errores frecuentes de la poda, se observan pitones verticales, orientados hacia adentro y ubicados en la cruz.

Importante: dejar siempre la cruz libre y eliminar todo tipo de elemento mal ubicado para que ingrese luz y aire.

Importante: dejar pitones sólo como elemento de renuevo (implica cortar el brazo viejo en la siguiente poda). Estos se dejan orientados hacia afuera y horizontalizados. Es preferible no dejar pitones a dejar un pitón mal ubicado. Nunca dejar más de un pitón por bracero.

Cuarteles Cereza/Flame Seedless. En ambos acasos las plantas presentan signos de envejecimiento, braceros enmaderados que avanzan hacia la melga, lo que dificulta el trabajo con tractor. Es necesario dejar pitones sólo para renovación y de ser estrictamente necesario. Pitón: máximo uno por bracero orientado hacia afuera y por debajo de los cargadores. Hacer renovación de un bracero envejecido/enmaderado eliminando uno por año y redistribuir su carga entre los braceros restantes. Esto permitirá mantener en el tiempo a la planta sin que caiga la producción. Cruz libre para permitir el ingreso de aire y luz.

Flame Seedless nuevos. Existe un desequilibrio general orientado hacia la producción de madera. Se observan plantas de 4 a 6 kg de madera del año y brotes de hasta 13 m de longitud. La regulación de carga (aumento de la riqueza de poda), es el primer paso para controlar el desequilibrio; sin embargo, también deben reducirse las fertilizaciones y ajustar los riegos para que la planta produzca más fruta y se frene la producción excesiva de madera. Se observa que la poda del ciclo anterior fue pobre (50-60 yemas por planta), con un estilo tradicional y no apropiado para esta variedad. Las podas deben ser largas y se deben ajustar a su capacidad. Se recomiendan diferentes distribuciones (ecuaciones de poda) según los pesos de poda  que deben ser medidos.

Importante: variedades como Flame Seedless, Sultanina, Fiesta y Superior Seedless, necesitan podas largas.
  
Flame Seedless en formación. Se observan dos casos I) las plantas no llegan al alambre, con alto porcentaje de fallas, por lo que conviene rebajar a dos yemas y replantar. Esto garantizará la homogeneidad entre plantas en el futuro y facilitará el manejo; II) plantas que llegaron al alambre con diferentes situaciones de desarrollo. En todos estos casos no se respetó el criterio de poda de formación (30 cm por debajo del alambre, desyemados al primer ciclo). Esto implica que existen elementos que habrá que eliminar porque se ubican por encima de los alambres. Se recomienda hacer una medición y análisis particular de cada caso y determinar tres configuraciones posibles (depende del estado de crecimiento de la vid).

Poda de formación. El principal criterio a respetar es que se debe tener una planta bien formada antes de empezar a producir. De no existir una buena estructura, no se podrán sustentar altas producciones en el futuro.
1 Respetar la regla del codo o desyemar desde el cruce de los alambres 30 cm hacia abajo. Este sector debe quedar libre. La vid, durante unos años, continuará con su crecimiento primario (en altura) y, de haber elementos de sostén en el sector mencionado, estos crecerán por encima de los alambres deformando a la planta y generando desequilibrios fisiológicos.

2 Si existen dos sarmientos por debajo o próximos a los 30 cm desyemados, estos se atan a los alambres y se desyeman dejando sólo tres yemas basales. De esta manera, en el futuro, de cada bracero principal (dos) saldrán dos braceros secundarios terminando con cuatro braceros totales que podrán soportar de dos a tres cargadores por bracero. Esta se la denomina poda dicotómica y facilita la distribución de savia en la planta.

3 Si no existen dos sarmientos por debajo de los 30 cm desyemados, se espera a la temporada en verde. En la primavera emergerán los nuevos brotes. De estos se seleccionan los mejores posicionados y se los conducirá hasta el alambre. Se los ata y despunta para que la planta emita feminelas basales o “nietos” (hay que eliminar o desbrotar las feminelas superiores), terminando con la formación de los cuatro braceros durante la temporada en verde.

4 Si la planta no llegó a los alambres principales, esta debe ser rebajada a dos yemas.



Figura 1. Plantas con braceros enmaderados y envejecidos que necesitan una poda de rejuvenecimiento eliminando un bracero mal ubicado por año y redistribuyendo los elementos de carga.



Figura 2. Sector de plantas con signos de salinidad, déficit hídrico y/o problemas de suelo.


Figura 3. Plantas nuevas de Flame Seedless en las que no se aplicó “la regla del codo” y los braceros pasan la altura de los alambres, haciendo que la planta se desequilibre y pierda forma.


Figura 4. Flame Seedless con exceso de vigor. Pesos de madera de 5-6 kg/planta y brotes de 13 m de longitud.



Figura 5. Elementos de poda (pitón) vertical y ubicado en el interior de la cruz: esta siempre debe estar libre.

viernes, 15 de mayo de 2020

Diagnósticos: bases de cambio para mejorar las producciones. 25 de Mayo, San Juan


Variedades: Cereza, Pedro Giménez, Sultanina, Flame Seedless y Fiesta

Observaciones y recomendaciones
En general, la finca se observa con alto potencial productivo; sin embargo, sus suelos son pesados, hay signos de salinización relacionados con un mal manejo del agua de riego y la mayoría de los viñedos muestran signos de envejecimiento derivado de criterios de poda sin renovación. Se establece un potencial productivo de 1.000.000 kg para la finca (30 ha cultivadas), como una meta a alcanzar haciendo mejoras.

Cereza y Pedro Giménez. Estos cuadros son los que mayores signos de decrepitud muestran. Se debe armar un plan de reconversión (de 5 a 10 años), e ir arrancando e implantando a una tasa de 1 cuartel/año o 1 cuartel/2 años. Esto está ligado a la capacidad de inversión (se recomienda calcular una evaluación de inversión). Se debe iniciar la reconversión productiva por los cuarteles que se encuentran en punto de corte (ingreso=costo). Para ello se debe analizar las producciones de todos los cuarteles y determinar el orden en el que serán repuestos/eliminados.

De esta forma se podrán generar tres criterios:
I) Cuartel a levantar/arrancar de modo inmediato: criterio de manejo de mínimo costo y máxima extracción, haciendo podas a pitón (máxima cantidad de pitones por bracero – menor costo de poda), sin realizar sin ningún tipo de renovación.
II Cuartel a arrancar en el mediano plazo: también se debe aplicar un criterio de máxima extracción; sin embargo, es conveniente hacer una regulación de la carga (yemas/planta a dejar), según la capacidad de productiva.
III Cuartel a arrancar en el largo plazo: bajo el mismo esquema de mínimo costo, se puede aplicar un criterio de podas mixtas y regulación de carga con una renovación mínima (eliminación de un bracero enmaderado y mal ubicado por año con redistribución de elementos de carga en el resto de los braceros).

Se observan parcelas que, aún envejecidas, muestran signos de vigor, por lo que su capacidad productiva ligada a un buen manejo del suelo y el riego pueden aumentar a un nivel casi normal (35 a 40 t/ha).

Rebrotes. Se observan brotes con crecimiento activo. Esto indica que existe un desequilibrio y una pérdida energética para la planta. Los brotes no deben crecer en el otoño y la planta debería estar transportando sustancias de reserva hacia el tronco y las raíces. Estos nuevos crecimientos, no alcanzarán a madurar y se necrosarán (se pasman), con la primera helada. Se recomienda ajustar la fertilización, regular el riego y regular la poda para equilibrar la planta.

En todos los casos recuperables o de largo plazo, la cruz debe quedar libre para permitir el ingreso de luz y aire. Sólo se debe dejar hasta un pitón por bracero, si es necesario y si está bien ubicado (horizontalizado y hacia afuera, nunca hacia arriba y/o hacia adentro).
  
Sultanina. Se trata de un cuartel envejecido con pocas probabilidades de recuperación. Es una variedad temprana por lo que hay que hacer podas tardías y largas (cargadores de 12-14 yemas), para reducir el riesgo de daño por heladas tardías. Se recomienda un esquema de costo mínimo hasta su arrancado.

Flame Seedless. Estas plantas muestran buen vigor y un comienzo de procesos de enmaderamiento por malas podas. Hay que hacer renovación y regulación de carga.

Fiesta. En este caso, las plantas presentan excelente expresión vegetativa. Sin embargo, a diferencia de Flame Seedless, estas no poseen fertilidad de yemas basales, por lo que son propensas a daños por heladas tardías (la zona es fría). Hay que hacer podas de rejuvenecimiento (eliminación de un bracero por año), podas largas (hasta 15 yemas), regulación de carga según peso de poda (de 35 a 40 yemas por kilogramo de madera del año) y podas tardías (mediados de agosto.

Importante: para evitar que se envejezca la planta se debe eliminar un bracero enmaderado por planta y por temporada, redistribuyendo el elemento de carga en los restantes braceros. A su vez, se debe tratar de que los elementos de carga se aproximen a la cruz (seleccionar los que estén más cerca).  Siempre son preferibles sarmientos dorados de yemas globosas.

Cambios en el manejo
Manejo del suelo. Se realiza una labranza tradicional (arado a los cuatro vientos), en temporada de primavera-verano. Dado que se trata de suelos pesados, esto no es conveniente porque favorece la compactación del suelo y formación de pie de arado. Recomendaciones: se debe aplicar un criterio de labranza mínima, con agregados de materia orgánica (monte, orujo, guano, entre otros). La labranza se debe restringir al otoño-invierno. Las labores de primavera-verano se relacionan con pulverizaciones y control de malezas o fertilizaciones, únicamente.

Labranzas de otoño-invierno factibles para incorporación de materia orgánica
1 Subsolar melga por medio año por medio (en invierno), hasta 1 m de profundidad (regla: potencia de tractor 1 HP/cm); por lo que se necesita un tractor de 100 HP o más de una pasada en la misma línea hasta alcanzar 1 m de profundidad. Luego, con zanjeador, garantizando 60 cm de profundidad, hacer agregado de materia orgánica.
 2 Hacer hoyos con hoyadora de 90 cm de largo y 30 cm de diámetro. Dos hoyos por planta en la melga o en la hilera, a 60 cm desde el tronco. Los hoyos deben ser rellenados con materia orgánica (guano, monte, orujo agotado o una mezcla de ellos, siendo ideal el guano de cabra).
3 En una plantación nueva, en la melga y nunca sobre la hilera, se debe garantizar 1 m de profundidad para el crecimiento de la raíces. Por este motivo se recomienda en uso de subsolador a 1 m de profundidad en todas las melgas y cruzado. Esto romperá capas compactadas, caliche, pie de arado y facilitará el drenaje.
4 En todas las plantaciones nuevas se recomienda hacer una calicata para evaluar las labores de suelo y solucionar, antes de la plantación, posibles problemas en profundidad.

Estado fitosanitario. Se observan hojas con signos de peronóspora en estado detenido. Esto se asocia a una densa cobertura de la canopia, alta humedad en el interior del parral y poca aireación. El inóculo (esporas del hongo), quedará en la hojarasca del suelo. Por este motivo hay que estar atento a las condiciones climáticas del siguiente ciclo vegetativo y realizar un tratamiento fitosanitario temprano y específico para esta enfermedad, con un producto sistémico. Se debe respetar la dosis (siempre expresadas por hectárea), conocer el volumen erogado (l/ha de agua) y hacer las aplicaciones en los momentos oportunos (máxima vulnerabilidad de la enfermedad).

Riego deficitario. Hay, en toda la finca, signos de intoxicación con cloro (margen necrosado de la hoja y/o hojas secas que se caen, quedando sólo el pecíolo), y boro (puntos negros que se acumulan en el margen de las hojas). Esto se relaciona con un riego deficitario (frecuencia o lámina de riego insuficiente) o la falta de un requerimiento de lixiviación (lavado). También esto se asocia a vueltas de riego superiores a 30 días y unidades de riego de gran tamaño. Se recomienda: cambiar la distribución del riego (en la actualidad es a manto o por inundación) y reducir el tamaño de las unidades de riego abordando todas melgas y/o hileras. Además, hay que hacer un control en los niveles, ya que se detecta un riego en contrapendiente desde la acequia principal en el centro del cuartel (riego hacia ambos lados).


Figura 1. Formas de armar bordos para sistematizar el agua de riego, aumentando la eficiencia de aplicación.

Importante: para facilitar la maduración de los sarmientos, es necesario programar los riegos para que finalicen a comienzos de abril, obligando a la planta a detener su crecimiento y, así, evitar que quede agua en el tronco lo que puede provocar la muerte de la planta.

Importante: de continuar con los riegos seguirá circulando la sabia y, llegada la primera helada, podrá quedar agua en el tronco que por congelación lacerará el floema (tejido vivo de conducción de savia elaborada). De ocurrir esto, la planta podrá tener dos consecuencias: muerte parcial de la parte aérea con lenta recuperación y/o muerte total de la parte aérea con rebrote desde la base en la siguiente estación de crecimiento.

Manejo de malezas. Durante primavera-verano no se debe usar rastra/arado para el control de malezas. Esto se debe a que cada vez que el tallo de la cañota es cortado genera nuevas plantas, agravando el nivel de infestación (una de las principales malezas observadas). En esta época se puede hacer control de malezas con productos sistémicos y selectivos. Es un momento de alta eficiencia porque la planta traslada el herbicida hacia sus órganos de reserva subterráneos, garantizando su muerte. Sin embargo, no se puede aplicar herbicida en la situación actual (1,5 m de altura de cañota y otras), sin antes usar una desmalezadora, no rastra (agrava el problema). Para el siguiente ciclo productivo de debe armar un programa de control de malezas con herbicidas sistémicos que contemple, por lo menos, cuatro intervenciones por cuartel, comenzando en septiembre y/o 10 cm de altura de malezas. Se pueden combinar drogas para control de cañota y amor seco. Ya que se posee maquinaria, el control de malezas es factible. Un control tardío (malezas de 15 a 20 cm), aumenta el gasto en herbicida y el tiempo operativo.
Herbicidas sistémico para hoja angosta (cañota y chipica): haloxifop metil (dosis 3 l/ha); quizalofop etil (dosis 3,5 l/ha). Regular el gasto de agua a 200 l/ha. Se puede mejorar la eficiencia de la aplicación bajando el pH de la solución (uso de ácido fosfórico 20 ml/100 l de agua).
Herbicidas no selectivo defoliantes: paraquat (dosis 3 l/ha). En este caso, se debe tener cuidado de que no haya deriva.
Herbicidas sistémicos: MCPA 28% (dosis 1,5 l/ha). En este caso, hay que tener precauciones extremas ya que se trata de un herbicida de acción hormonal con alta volatilidad, por lo que no debe aplicarse con viento; de haber deriva, ocasionará lesiones en la vid. La combinación de este con glifosato (dosis de 2 a 6 l/ha según la infestación), es efectiva cuando en el cuartel hay una mezcla de diferentes especies: cañota, chipica, cardo, amor seco y suspiro.
Cuando la maleza pasa los 30 cm de altura o más, se recomienda primero segar con desbrozadora (desmalezadora) y luego aplicar el herbicida; así aumentará la eficiencia de aplicación reduciendo la cantidad de caldo a emplear. Durante la primavera verano, es factible formar un mulch vegetal y realizar control de malezas con desbrozadora, teniendo en cuenta que la capacidad de trabajo máxima de la máquina es de 0,5 ha/h a 0,3 ha/h. Con este valor se puede armar un plan de trabajo que permita verificar la demora en recorrer todos los cuarteles y el momento en el que se debe reiniciar la operación.

Importante: para todos los casos de uso de herbicidas, la velocidad del viento no debe ser superior a 10 km/h y las temperaturas de aplicación deben ser menores a 25 °C. Nunca deben combinarse con urea ni gas oil. Iniciar el control de malezas con 5-10 cm de altura con una cobertura del 100% de la superficie.
  


Figura 2. Plantas envejecidas, con signos de déficit hídrico y presencia de cañota.



Figura 3. Hoja con síntomas de deficiencia de magnesio.


Figura 4. Brote con crecimiento activo en otoño – signo de desequilibrio.



Figura 5. Plantas nuevas con braceros enmaderados.



Figura 6. Plantas de la variedad Fiesta con signos de buena expresión vegetativa y brotes de más de 2 m de longitud.



Figura 7. Labranza tradicional para control de malezas.



Figura 8. Planta con signos de intoxicación con cloro por déficit hídrico.


Figura 9. Retortuño o espina blanca: maleza indicadora de sales en el suelo.



Figura 10. Hoja con signos de ataque de peronóspora en estado detenido.

Visitas a finca: Carpintería; desde la poda hasta el suelo.


Observaciones y recomendaciones

Malbec y Ancellotta nuevas. Las plantas que no llegaron a la altura del alambre deben ser podadas a dos yemas. Se sugiere armar una estructura de doble piso con cordones libres de modo tal que, cada planta tendrá 2 m de cordón (uno a cada lado), en el mismo nivel. Así, habrá un piso superior y otro inferior intercalado planta por medio. Esto evita los efectos fisiológicos de acrotonía; competencia en la misma planta y evita que, con el paso del tiempo, el piso inferior desaparezca (ver figura 1).

Malezas. En primavera-verano, además del uso de debrozadora (desmalezadora) se sugiere una aplicación posterior con paraquat (herbicida de acción total o desfoliante). Dosis 4 l/ha. Regular la maquinaria en esta época a un tiempo operativo de 2 h/ha y un gasto 200 l/ha.

Red Globe vieja. Aplicar un criterio de máxima carga aumentando la cantidad de cargadores (dos por bracero), y dejando siete yemas/cargador. Reducir el costo de manejo hasta que sea levantado/arrancado. Se debe atar.

Torrontés viejo. Se puede aplicar una poda a pitón para reducir el costo con un criterio de máxima cantidad de pitones por planta. Se recomienda, como en el caso anterior, reducir costos de manejo hasta que sea levantado/arrancado.

Flame 16. Hay plantas con diferentes expresiones vegetativas y capacidades por lo que se debe aplicar una poda selectiva. Conviene hacer una medición de peso de poda y regulación previa. Plantas con menor peso de madera de poda (decrépitas) se las debe podar a pitón para que se recuperen o formen estructura de sostén. Luego hay que definir la carga para plantas de expresión vegetativa alta y media. Siempre conviene dejar guías largas en esta variedad (13 yemas/cargador), y hacer poda tardía (agosto), para reducir riesgos de helada. En general se puede indicar, para una planta normal de 6 a 8 cargadores de 13 yemas/cargador.

Cereza/Cereza olivos. Se observa un cuartel con excelente vigor y brotes de 1,5 m a 2 m. Se recomienda aumentar la riqueza de poda dejando siete yemas/cargador y de 1 a 2 cargadores por planta (los más cercanos a la cruz). Dejar pitones sólo para renovación y de ser estrictamente necesario. Pitón: máximo uno por bracero orientado hacia afuera y por debajo de los cargadores. Hacer renovación de un bracero envejecido/enmaderado eliminando uno por año y redistribuir su carga entre los braceros restantes. Esto permitirá mantener en el tiempo a la planta sin que caiga la producción. Cruz libre para permitir el ingreso de aire y luz.

Control de mosca de los frutos (frutales). Usar malatión o mercaptotión al inicio del envero o cambio de coloración cada 15 días y detener las aplicaciones 20 días antes de consumo. Consultar dosis antes de aplicación (primavera).

Syrah. Comenzar la poda por estos cuarteles, aplicando pota a pitón, máxima cantidad de pitones/planta.

Flame 23 arenoso. Se aplica criterio de regulación de carga (cantidad de yemas/planta), mencionado. Dado que este suelo es arenoso y este es el principal factor de debilidad y baja expresión vegetativa, se recomienda todos los años, en otoño, hacer aplicaciones de guano/materia orgánica con hoyadora de 90 cm de largo y 30 cm de diámetro a razón de dos hoyos por planta.

Criterio de poda general: a las plantas débiles se les debe hacer una poda pobre con 30 yemas/kg de madera del año; a plantas vigorosas y según la variedad, se les hace una poda rica (mayor cantidad de yemas por planta) con 35-40 yemas/kg de madera del año.

Flame Seedless caída. Regular según vigor: máximo vigor 8 guías de 13 yemas/guía; vigor medio: 6 guías de 12-13 yemas/guía; vigor pobre: 4 guías de 12 yemas/guía o cargador.

Red globe para uva de mesa. La planta muestra excelente expresión vegetativa por lo que se recomienda respetar el criterio de poda aplicado (de 6 a 7 cargadores de 5 yemas/cargador). Luego del cuaje y con baya no mayor a 9 mm se recomienda dar las indicaciones de poda del racimo. Esta labor, realizada de modo temprano, evita efectos de daño por quemadura/sol (Red globe es muy sensible). También, se recomienda una aplicación de ácido giberélico con 4 mm de diámetro de baya a 20 ppm (mg/l). De ser necesario, habrá que hacer raleo de racimo para que no se toquen. También se recomienda una aplicación temprana de botryticida (consultar por plan fitosanitario 10 días antes de realizar la compra de drogas). Luego del cuaje, temprano (9-10 mm de baya) hacer la poda del racimo para darle forma (labor en verde muy diferente a la de Superior Seedless). En la poda invernal, aplicar criterio de renovación, eliminando un bracero enmaderado por planta y haciendo redistribución de carga.

Control de cañota: se debe hacer una aplicación de herbicida selectivo cuando la maleza tiene de 5 a 10 cm de altura con haloxifop metil (3 l/ha) o quizalofp etil (3,5 l/ha).

Más abajo se puede observar un ejemplo de registro de planilla, por semana, que facilita el control y planificación de actividades.



Figura 1. Sistema Scott Henry modificado. Se alterna una planta por medio con cordones superiores e inferiores. En este caso no se hace poda a pitón y se dejan cargadores libres, para adaptación a sistema box prunning.


Registro de gastos en finca.
Fecha: 04/03 al 08/03
Agroquímicos (fungicidas, insecticidas, herbicidas, fertilizantes y otros)
Día
Marca
Cantidad
Cuadro Nº
4
Round Up
12 l
A
5
Urea
3 bolsas
B
6
Round Up
6 l
E




























Actividades con tractor
Día
Actividad
horas /jornales
Cuadro Nº
4
Aplicación de herbicida
8 h
A
5
Rastra para cosecha
4 h
C
5
Rastra para cosecha
4 h
B
6
Aplicación de herbicida
4 h
E
















Personal (poda, atada, labores en verde, fertilizaciones, riego, etc).
Día
Actividad
horas /jornales
Cuadro Nº
7
Riego
10 h
C
7
Riego
5 h
B
8
Limpieza de galpón
8 h
Galpón
8
Conteo de fallas
8 h
D